Virgen de Guadalupe Mi Virgen Ranchera Lyrics - Letra de Mi Virgen Ranchera
A ti Virgencita Mi Guadalupana
- A ti Virgencita Mi Guadalupana
- Que México entero te brinda sonriente
- Y quiero decirte
- Que México te ama, que nunca está triste
- Tu nombre es arrullo y el mundo lo sabe
- Eres nuestro orgullo, mi México es tuyo
- Tú guardas la llave
- Que viva la reina de los mexicanos
- La que, con sus manos sembró rosas bellas
- Y puso en el cielo millares de estrellas
- Yo sé que, en el cielo
- Virgencita chula, eres un encanto
- Por patria nos diste
- Este lindo suelo
- Y lo bendijiste, porque era tu anhelo
- Mi Virgen Ranchera, mi Virgen Morena
- Eres nuestra dueña
- México es tu tierra
- Y Tú su bandera
- Que viva la Reina de los mexicanos
- La que con sus manos sembró rosas bellas
- Y puso en el cielo millares de estrellas
Hoy quiero ofrecerte un canto valiente, un canto lleno de amor y devoción. A ti, Virgencita Mi Guadalupana, te brindo este humilde tributo, como muestra de gratitud y admiración. Eres la madre de México, la protectora de nuestro pueblo, y en este día quiero expresarte todo mi cariño y respeto.
Que México entero te brinda sonriente
México entero se une en una sola voz para cantarte, para honrarte y para agradecerte. Desde el norte hasta el sur, desde el este hasta el oeste, todos los mexicanos te llevamos en nuestro corazón. Eres la luz que guía nuestros caminos, la esperanza que nos impulsa a seguir adelante. Tu presencia nos llena de alegría y nos da fuerzas para enfrentar cualquier adversidad.
Y quiero decirte
Quiero decirte, Virgencita, lo que tú ya sabes. Sabes que México te ama, que nunca está triste cuando te invocamos. Tu nombre es un bálsamo para nuestras almas, una melodía que nos reconforta. En cada rincón de nuestro país, se escucha tu nombre con devoción y gratitud. Eres la madre que nos cuida, la protectora que nos ampara.
Que México te ama, que nunca está triste
Porque de nombrarte el alma se inflama, porque al pronunciar tu nombre sentimos una conexión profunda contigo. Eres nuestro refugio en momentos de angustia, nuestra fortaleza en tiempos de debilidad. Tu amor nos envuelve y nos da esperanza, nos hace sentir amados y protegidos. Eres el faro que ilumina nuestro camino, la guía que nos muestra el camino hacia la felicidad.
Tu nombre es arrullo y el mundo lo sabe
Tu nombre, Virgencita, es un arrullo para nuestros corazones. Es una melodía que nos acaricia el alma y nos llena de paz. El mundo entero reconoce tu grandeza y tu amor incondicional. Eres un símbolo de fe y esperanza, una inspiración para millones de personas en todo el mundo. Tu nombre trasciende fronteras y une a personas de diferentes culturas y religiones.
Eres nuestro orgullo, mi México es tuyo
Eres nuestro orgullo, Virgencita, porque eres la representación de la esencia mexicana. Eres la madre que nos dio patria, la que nos bendijo con este hermoso suelo. México es tu tierra, y tú eres su bandera. Nos has dado identidad y nos has enseñado a amar nuestras raíces. Eres la fuerza que nos impulsa a luchar por un México mejor, más justo y más próspero.
Tú guardas la llave
Tú, Virgencita, guardas la llave de nuestros corazones. Eres la intermediaria entre nosotros y Dios, la que nos acerca a su divina presencia. Tu intercesión es poderosa y tu amor infinito. Nos proteges de todo mal y nos guías por el camino del bien. Eres nuestra madre celestial, la que nos cuida y nos acompaña en cada paso que damos.
Que viva la reina de los mexicanos
¡Que viva la reina de los mexicanos! ¡Que viva la Virgen de Guadalupe! Hoy y siempre te honramos y te aclamamos con alegría y gratitud. Eres la madre que nos une, la que nos da fuerzas para seguir adelante. Tu amor nos inspira y nos impulsa a ser mejores personas, a amar y respetar a nuestros semejantes.
La que, con sus manos sembró rosas bellas
Tú, Virgencita, con tus manos divinas, sembraste rosas bellas en nuestro país. Cada rincón de México está lleno de tu amor y de tu presencia. Tus milagros y bendiciones se manifiestan en cada flor que florece, en cada paisaje que nos maravilla. Eres la artista que pintó de colores nuestra tierra, la que nos regaló la belleza de la naturaleza.
Y puso en el cielo millares de estrellas
En el cielo, Virgencita, pusiste millares de estrellas para iluminar nuestro camino. Cada noche, al contemplar el firmamento, recordamos tu amor y tu protección. Eres la estrella que guía nuestros sueños, la que nos muestra el camino hacia la felicidad. Tu luz nos acompaña en cada paso que damos, en cada decisión que tomamos.
Yo sé que, en el cielo
Yo sé que, en el cielo, escuchas mi canto, mi humilde tributo a tu grandeza. Sé que con celo nos cubres con tu manto, nos proteges y nos cuidas con amor infinito. Eres nuestra madre celestial, la que nos escucha y nos consuela en momentos de tristeza. Tu presencia nos llena de paz y nos da esperanza.
Virgencita chula, eres un encanto
Virgencita chula, eres un encanto, una joya preciosa que brilla en el firmamento. Tu belleza trasciende lo terrenal y nos eleva hacia lo divino. Eres la reina de nuestros corazones, la que nos inspira a ser mejores personas. Tu amor nos transforma y nos impulsa a amar y respetar a nuestros semejantes.
Por patria nos diste
Por patria nos diste este lindo suelo, nos bendijiste con un país lleno de riquezas y bellezas. México es un regalo que nos has dado, un tesoro que debemos cuidar y preservar. Tu amor por nuestra patria es evidente en cada rincón de nuestro país, en cada tradición y en cada manifestación cultural.
Este lindo suelo
Este lindo suelo es testigo de tu amor y de tu protección. Cada montaña, cada río, cada valle lleva tu huella, tu bendición. Eres la guardiana de nuestra tierra, la que nos protege de todo mal. Tu presencia nos llena de alegría y nos da fuerzas para enfrentar cualquier adversidad.
Y lo bendijiste, porque era tu anhelo
Tu anhelo era tener un santuario cerquita del cielo, un lugar sagrado donde tus hijos pudieran acudir a pedirte ayuda y consuelo. Y así fue como nos diste la Basílica de Guadalupe, un lugar de encuentro y de fe. Cada año, millones de personas acuden a tu santuario para agradecerte y pedirte tus bendiciones.
Mi Virgen Ranchera, mi Virgen Morena
Mi Virgen Ranchera, mi Virgen Morena, eres la dueña de nuestros corazones. Tu imagen nos acompaña en cada paso que damos, en cada momento de nuestras vidas. Eres la madre que nos cuida y nos protege, la que nos da consuelo en momentos de tristeza. Tu amor es incondicional y tu presencia nos llena de paz.
Eres nuestra dueña
Eres nuestra dueña, Virgencita, la que nos guía y nos protege. Tu amor nos envuelve y nos da fuerzas para seguir adelante. Eres la fortaleza que nos impulsa a luchar por nuestros sueños, por un México mejor. Tu ejemplo de amor y servicio nos inspira a ser mejores personas, a amar y respetar a nuestros semejantes.
México es tu tierra
México es tu tierra, Virgencita, y tú eres su bandera. Eres el símbolo de nuestra identidad, de nuestra cultura y de nuestra fe. Tu amor nos une como mexicanos, nos hace sentir parte de una gran familia. Eres la madre que nos cuida y nos protege, la que nos da esperanza en tiempos difíciles.
Y Tú su bandera
Tú, Virgencita, eres la bandera de México, la que nos representa ante el mundo. Tu imagen es reconocida en todos los rincones del planeta, y tu amor trasciende fronteras. Eres la embajadora de nuestra cultura, la que nos enseña a amar y respetar nuestras raíces. Tu presencia nos llena de orgullo y nos impulsa a ser mejores personas.
Que viva la Reina de los mexicanos
¡Que viva la Reina de los mexicanos! ¡Que viva la Virgen de Guadalupe! Hoy y siempre te honramos y te aclamamos con alegría y gratitud. Eres la madre que nos une, la que nos da fuerzas para seguir adelante. Tu amor nos inspira y nos impulsa a ser mejores personas, a amar y respetar a nuestros semejantes.
La que con sus manos sembró rosas bellas
Tú, Virgencita, con tus manos divinas, sembraste rosas bellas en nuestro país. Cada rincón de México está lleno de tu amor y de tu presencia. Tus milagros y bendiciones se manifiestan en cada flor que florece, en cada paisaje que nos maravilla. Eres la artista que pintó de colores nuestra tierra, la que nos regaló la belleza de la naturaleza.
Y puso en el cielo millares de estrellas
En el cielo, Virgencita, pusiste millares de estrellas para iluminar nuestro camino. Cada noche, al contemplar el firmamento, recordamos tu amor y tu protección. Eres la estrella que guía nuestros sueños, la que nos muestra el camino hacia la felicidad. Tu luz nos acompaña en cada paso que damos, en cada decisión que tomamos.
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