Novena de San Judas Tadeo Día 1 - Oraciones para el primer día

La novena de San Judas Tadeo es una poderosa forma de oración que nos permite acercarnos a este santo y pedir su intercesión en nuestras necesidades. Durante nueve días, nos unimos en oración para pedir su ayuda y protección. En este primer día de la novena, nos enfocaremos en oraciones específicas para invocar la intercesión de San Judas Tadeo.
Oración inicial
Comenzamos este primer día de la novena de San Judas Tadeo con una oración inicial, en la cual nos dirigimos a él con humildad y confianza:
Oh glorioso San Judas Tadeo, apóstol y mártir, fiel siervo y amigo de Jesús, el nombre del traidor ha sido la causa de que fueras olvidado por muchos, pero la Iglesia te honra e invoca universalmente como patrón de los casos difíciles y desesperados. Ruega por mí, que estoy tan desolado. Te imploro que me concedas la gracia que tanto necesito (menciona tu petición). Te prometo, glorioso San Judas Tadeo, acordarme siempre de este gran favor y nunca dejar de honrarte como mi especial y poderoso patrono, y hacer todo lo que esté a mi alcance para fomentar tu devoción. Amén.
Con esta oración, nos acercamos a San Judas Tadeo con fe y confianza, sabiendo que él intercederá por nosotros ante Dios.
Ruego a San Judas Tadeo
En este primer día de la novena, también podemos hacer un ruego especial a San Judas Tadeo, pidiéndole su protección y ayuda en nuestras dificultades:
San Judas Tadeo, te ruego que intercedas por mí ante el Señor. Tú, que fuiste llamado por Jesús a ser su apóstol y diste tu vida por Él, conoce mis penas y dificultades. Te pido que me ayudes a ser fiel en el cumplimiento de la voluntad de Dios y a encontrar consuelo en medio de mis aflicciones. Te confío mis necesidades y te pido que me concedas la gracia que tanto anhelo (menciona tu petición). Confío en tu poderosa intercesión y en tu amor por todos los que te invocan. Amén.
Con este ruego, nos dirigimos a San Judas Tadeo como nuestro intercesor ante Dios, confiando en su poder y amor por nosotros.
Oración final
Para concluir este primer día de la novena de San Judas Tadeo, recitamos una oración final en la cual reafirmamos nuestra confianza en su intercesión y le pedimos que nos acompañe a lo largo de estos nueve días de oración:
Glorioso Apóstol, San Judas Tadeo, por amor de Jesús y María, escucha mi oración y protege a cuantos con fervor te invocan. Tú, que eres poderoso en los cielos y en la tierra, intercede por mí ante el Señor y obtén para mí las gracias que tanto necesito. Te prometo, querido San Judas Tadeo, honrarte siempre como mi especial y poderoso patrono, y difundir tu devoción entre todos aquellos que necesitan de tu ayuda. Amén.
Con esta oración final, nos despedimos de San Judas Tadeo en este primer día de la novena, confiando en su intercesión y en su amor por nosotros.
Continuaremos con la novena de San Judas Tadeo en los próximos días, confiando en su poderosa intercesión y en su amor por todos aquellos que acuden a él en busca de ayuda. Que este primer día de la novena sea un momento de encuentro con San Judas Tadeo y de renovación de nuestra fe en su poder y amor.
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