Letras del canto Ya no eres pan y vino - Descubre las palabras

El canto "Ya no eres pan y vino" es una hermosa composición que forma parte del repertorio litúrgico cristiano. Esta canción, llena de significado y emotividad, nos invita a reflexionar sobre el sacrificio de Jesús en la cruz y su presencia en la Eucaristía. A través de sus letras, podemos adentrarnos en la profundidad de este misterio y renovar nuestra fe en la presencia real de Cristo en el pan y el vino consagrados.
Estrofa 1
Ya no eres pan y vino, eres el cuerpo y la sangre del Señor,
que se entrega por amor, para darnos salvación.
En cada hostia consagrada, en cada cáliz de vino,
se hace presente Jesús, el Hijo de Dios divino.
En esta primera estrofa, las palabras nos hablan de la transformación que ocurre en la Eucaristía. El pan y el vino, que antes eran simples elementos, se convierten en el cuerpo y la sangre de Cristo. Es a través de este misterio que Jesús se entrega por amor y nos ofrece la salvación. Cada vez que se consagra una hostia o se vierte vino en el cáliz, Jesús se hace presente de manera real y tangible.
Estribillo
Oh, Jesús sacramentado, te adoramos con devoción,
postrados ante tu altar, te ofrecemos nuestro corazón.
El estribillo nos invita a adorar a Jesús sacramentado, presente en la Eucaristía. Nos postramos ante el altar, reconociendo su divinidad y ofreciéndole nuestro corazón como signo de entrega y amor.
Estrofa 2
En cada comunión, nos unimos a tu sacrificio,
participamos de tu vida, de tu amor y de tu misterio.
En cada hostia consagrada, en cada cáliz de vino,
nos encontramos contigo, Jesús, nuestro Dios divino.
En la segunda estrofa, las palabras nos hablan de la comunión con Jesús. A través de la Eucaristía, nos unimos a su sacrificio y participamos de su vida, amor y misterio. Cada vez que recibimos la hostia consagrada o el vino, nos encontramos con Jesús de manera íntima y personal.
Estribillo
Oh, Jesús sacramentado, te adoramos con devoción,
postrados ante tu altar, te ofrecemos nuestro corazón.
El estribillo se repite, recordándonos la importancia de adorar a Jesús sacramentado y ofrecerle nuestro corazón.
Estrofa 3
En cada celebración, nos unimos a tu pueblo santo,
formamos un solo cuerpo, en comunión y en amor.
En cada hostia consagrada, en cada cáliz de vino,
nos encontramos contigo, Jesús, nuestro Dios divino.
En la tercera estrofa, las palabras nos hablan de la unidad que se experimenta en la celebración de la Eucaristía. Nos unimos al pueblo santo de Dios y formamos un solo cuerpo en comunión y amor. Cada vez que se consagra una hostia o se vierte vino en el cáliz, nos encontramos con Jesús, quien es nuestro Dios divino.
Estribillo
Oh, Jesús sacramentado, te adoramos con devoción,
postrados ante tu altar, te ofrecemos nuestro corazón.
El estribillo vuelve a repetirse, recordándonos la importancia de adorar a Jesús sacramentado y ofrecerle nuestro corazón.
Estrofa 4
En cada despedida, nos llevas en tu bendición,
nos envías al mundo, a ser testigos de tu amor.
En cada hostia consagrada, en cada cáliz de vino,
nos encontramos contigo, Jesús, nuestro Dios divino.
En la cuarta estrofa, las palabras nos hablan de la despedida que ocurre al final de la celebración de la Eucaristía. Jesús nos lleva en su bendición y nos envía al mundo para ser testigos de su amor. Cada vez que se consagra una hostia o se vierte vino en el cáliz, nos encontramos con Jesús, quien es nuestro Dios divino.
Estribillo
Oh, Jesús sacramentado, te adoramos con devoción,
postrados ante tu altar, te ofrecemos nuestro corazón.
El estribillo se repite nuevamente, recordándonos la importancia de adorar a Jesús sacramentado y ofrecerle nuestro corazón.
Conclusión
El canto "Ya no eres pan y vino" nos invita a adentrarnos en el misterio de la Eucaristía y a renovar nuestra fe en la presencia real de Jesús en el pan y el vino consagrados. A través de sus letras, podemos reflexionar sobre el sacrificio de Jesús en la cruz y su amor inmenso por cada uno de nosotros. Que este canto nos inspire a adorar a Jesús sacramentado y a ofrecerle nuestro corazón en cada celebración eucarística.
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