Letra Señor te ofrecemos el vino y el pan - Completa canción

La canción "Señor, te ofrecemos el vino y el pan" es una hermosa composición que nos invita a ofrecerle a Dios nuestros dones y agradecerle por su amor y misericordia. Con una letra profunda y una melodía conmovedora, esta canción nos lleva a reflexionar sobre la importancia de la Eucaristía y el sacrificio de Jesús en la cruz.

Estrofa 1

Señor, te ofrecemos el vino y el pan,
nuestro trabajo, nuestro caminar.
Toma Señor, nuestra vida entera,
te la entregamos, te la damos hoy.

En esta estrofa, la letra nos invita a ofrecerle a Dios todo lo que somos y todo lo que hacemos. El vino y el pan representan los dones que presentamos en la Eucaristía, pero también simbolizan nuestra vida y nuestro esfuerzo diario. Al entregarle todo a Dios, reconocemos su soberanía sobre nuestras vidas y le agradecemos por su amor y cuidado.

Estribillo

Te ofrecemos Señor, nuestro corazón,
nuestras alegrías y nuestro dolor.
Toma Señor, nuestra vida entera,
te la entregamos, te la damos hoy.

El estribillo de la canción nos recuerda que debemos ofrecerle a Dios no solo nuestras acciones, sino también nuestros sentimientos y emociones. Le entregamos nuestro corazón, con todas sus alegrías y dolores, confiando en que Él nos acompaña en cada momento de nuestra vida.

Estrofa 2

Señor, te ofrecemos el vino y el pan,
nuestros fracasos, nuestras ilusiones.
Toma Señor, nuestra vida entera,
te la entregamos, te la damos hoy.

En esta estrofa, la letra nos invita a ofrecerle a Dios también nuestras debilidades y nuestras esperanzas. Reconocemos que somos seres imperfectos y que a veces fallamos, pero confiamos en que Dios puede transformar nuestros fracasos en oportunidades de crecimiento. También le entregamos nuestras ilusiones y sueños, sabiendo que Él tiene un plan perfecto para nosotros.

Estribillo

Te ofrecemos Señor, nuestro corazón,
nuestras alegrías y nuestro dolor.
Toma Señor, nuestra vida entera,
te la entregamos, te la damos hoy.

El estribillo se repite nuevamente, recordándonos la importancia de ofrecerle a Dios todo nuestro ser, con todas sus experiencias y emociones. Le entregamos nuestra vida entera, confiando en que Él la guiará y la transformará según su voluntad.

Puente

En el puente de la canción, la melodía se intensifica y la letra nos invita a abrir nuestro corazón a la presencia de Dios. Reconocemos que Él está siempre con nosotros, dispuesto a escucharnos y a recibir nuestras ofrendas. Nos entregamos a Él sin reservas, confiando en su amor y misericordia.

Estribillo

Te ofrecemos Señor, nuestro corazón,
nuestras alegrías y nuestro dolor.
Toma Señor, nuestra vida entera,
te la entregamos, te la damos hoy.

El estribillo se repite nuevamente, reafirmando nuestra entrega total a Dios. Le ofrecemos nuestro corazón, con todas sus emociones, nuestras alegrías y dolores. Le entregamos nuestra vida entera, confiando en que Él la acogerá y la transformará según su voluntad.

Estrofa 3

Señor, te ofrecemos el vino y el pan,
nuestros sueños, nuestras esperanzas.
Toma Señor, nuestra vida entera,
te la entregamos, te la damos hoy.

En esta última estrofa, la letra nos invita a ofrecerle a Dios nuestros sueños y esperanzas. Reconocemos que Él es el autor de nuestros deseos más profundos y le confiamos nuestras metas y anhelos. Le entregamos nuestra vida entera, sabiendo que Él nos guiará en el camino hacia la realización de nuestros sueños.

Estribillo

Te ofrecemos Señor, nuestro corazón,
nuestras alegrías y nuestro dolor.
Toma Señor, nuestra vida entera,
te la entregamos, te la damos hoy.

El estribillo se repite una vez más, recordándonos la importancia de ofrecerle a Dios todo lo que somos y todo lo que tenemos. Le entregamos nuestro corazón, nuestras alegrías y dolores, nuestra vida entera. Confiamos en que Él nos escucha y nos acompaña en cada paso del camino.

Final

La canción "Señor, te ofrecemos el vino y el pan" nos invita a entregarle a Dios todo lo que somos y todo lo que tenemos. Nos recuerda la importancia de la Eucaristía como símbolo del sacrificio de Jesús en la cruz y nos anima a ofrecerle a Dios nuestros dones, nuestras debilidades, nuestros sueños y esperanzas. Al entregarle todo a Dios, reconocemos su amor y misericordia en nuestras vidas y nos abrimos a su guía y transformación.

Que esta canción sea una inspiración para ofrecerle a Dios nuestra vida entera, confiando en su amor y dejándonos transformar por su gracia.