Salmo 11 Biblia Católica: Salmos, 11 - Biblia Latinoamericana

Contenido del Salmo 11

El Salmo 11 es un salmo de confianza en Dios en medio de la adversidad. El salmista se enfrenta a la persecución y a los consejos de huir hacia el monte, pero decide poner su refugio en el Señor. A lo largo del salmo, el salmista expresa su confianza en la justicia de Dios y su seguridad en que los impíos recibirán su merecido.

1. El salmista pone su refugio en el Señor

El salmo comienza con una declaración de confianza en el Señor como refugio y fortaleza. El salmista declara: "En el Señor me refugio. ¿Cómo pueden decirme que huya hacia el monte como un ave?" (Salmo 11:1). El salmista se niega a huir y confía en que Dios lo protegerá.

2. Se pregunta cómo pueden decirle que huya hacia el monte

El salmista se sorprende de los consejos que le dan para huir hacia el monte. Él se pregunta cómo pueden decirle que huya como un ave. Esta pregunta retórica muestra su determinación de no huir y su confianza en que Dios lo protegerá.

3. Los impíos tensan su arco y ajustan sus flechas para herir a los rectos

El salmista reconoce la amenaza de los impíos que están preparados para atacar a los rectos. Él describe cómo los impíos tensan su arco y ajustan sus flechas para herir a los justos. Esta imagen visualiza la maldad y la violencia de los enemigos del salmista.

4. A pesar de los problemas, el justo confía en el Señor

A pesar de la adversidad y la amenaza de los impíos, el salmista mantiene su confianza en el Señor. Él declara: "Pero el Señor está en su templo santo; el Señor tiene su trono en el cielo" (Salmo 11:4). Esta afirmación muestra la creencia del salmista en la presencia y el poder de Dios incluso en medio de las dificultades.

5. El Señor está en su templo santo y tiene su trono en el cielo

El salmista enfatiza la presencia de Dios en su templo santo y su trono en el cielo. Esta afirmación muestra la soberanía y la autoridad de Dios sobre todas las cosas. El salmista confía en que Dios está en control y que Él intervendrá en su favor.

6. Sus ojos están observando a los hijos de Adán

El salmista reconoce que los ojos de Dios están observando a los hijos de Adán. Esta declaración muestra la omnisciencia de Dios y su conocimiento de todas las acciones y motivaciones de los seres humanos. El salmista encuentra consuelo en saber que Dios está atento a su situación y que no pasará desapercibida.

7. El Señor examina al justo y al impío

El salmista afirma que el Señor examina tanto al justo como al impío. Dios conoce los corazones y las intenciones de cada persona y juzgará a cada uno según sus obras. Esta declaración muestra la creencia del salmista en la justicia de Dios y su confianza en que los impíos recibirán su merecido.

8. Su alma odia a quienes aman la violencia

El salmista expresa su repudio hacia aquellos que aman la violencia. Él declara que su alma odia a los que se deleitan en hacer daño a los demás. Esta declaración muestra la postura moral del salmista y su rechazo a la maldad y la injusticia.

9. Sobre los malvados caerá fuego y azufre

El salmista profetiza que sobre los malvados caerá fuego y azufre como castigo por sus acciones. Esta imagen evoca la destrucción y el juicio divino sobre los impíos. El salmista confía en que Dios hará justicia y que los malvados recibirán su merecido.

10. El Señor es justo y ama la justicia

El salmista proclama la justicia de Dios y su amor por la justicia. Él declara: "El Señor es justo y ama la justicia" (Salmo 11:7). Esta afirmación muestra la confianza del salmista en la naturaleza y los atributos de Dios. Él confía en que Dios actuará de acuerdo con su justicia y hará lo que es correcto.

11. Los rectos contemplarán su rostro

El salmo concluye con una declaración de esperanza y promesa para los rectos. El salmista declara que los rectos contemplarán el rostro de Dios. Esta afirmación muestra la creencia del salmista en la recompensa y la comunión con Dios para aquellos que viven rectamente. Es una afirmación de esperanza y confianza en la fidelidad de Dios.

El Salmo 11 es un salmo de confianza en Dios en medio de la adversidad. El salmista pone su refugio en el Señor y se niega a huir. A pesar de la amenaza de los impíos, el salmista confía en la justicia de Dios y en que los malvados recibirán su merecido. El salmista encuentra consuelo en la presencia y el poder de Dios, y confía en que Él intervendrá en su favor. El salmo concluye con una declaración de esperanza y promesa para los rectos, quienes contemplarán el rostro de Dios.