Segundo día de la novena a San Judas Tadeo: Oración para fortalecer la fe

La novena a San Judas Tadeo es una tradición muy arraigada en la Iglesia Católica. Durante nueve días, los fieles se reúnen para rezar y pedir la intercesión de este santo, conocido como el patrono de los casos difíciles y desesperados. Cada día de la novena tiene una intención específica y una oración correspondiente. En este artículo, nos enfocaremos en el segundo día de la novena a San Judas Tadeo y en la oración para fortalecer la fe.

Oración para el segundo día de la novena a San Judas Tadeo

Oh glorioso San Judas Tadeo, fiel discípulo y apóstol de Jesús, hoy me acerco a ti con humildad y confianza para pedirte que intercedas por mí ante nuestro Señor. En este segundo día de la novena, te suplico que fortalezcas mi fe y me ayudes a creer en las promesas de Dios.

San Judas Tadeo, tú que experimentaste en tu vida la cercanía de Jesús y su amor incondicional, te pido que me ayudes a confiar plenamente en Él. A veces, mi fe se debilita y dudo de su presencia en mi vida. Te ruego que me concedas la gracia de tener una fe firme y constante, que no se tambalee ante las dificultades y pruebas.

San Judas Tadeo, tú que fuiste testigo de los milagros de Jesús y de su poder sanador, te pido que aumentes mi fe en su poder divino. Ayúdame a creer que nada es imposible para Dios y que Él puede obrar maravillas en mi vida. Que mi fe sea tan grande como para confiar plenamente en su voluntad y aceptar sus designios, aunque no los comprenda.

San Judas Tadeo, tú que fuiste elegido por Jesús para ser uno de los doce apóstoles, te pido que me ayudes a vivir mi fe de manera auténtica y valiente. Que no me avergüence de ser cristiano y que sea un testimonio vivo del amor de Dios en el mundo. Ayúdame a ser fiel a los mandamientos y a seguir el ejemplo de Jesús en todas las áreas de mi vida.

San Judas Tadeo, tú que eres conocido como el santo de los casos difíciles y desesperados, te pido que intercedas por todas las personas que han perdido la fe o que están pasando por momentos de crisis espiritual. Que tu poderosa intercesión les ayude a encontrar el camino de regreso a Dios y a experimentar su amor y misericordia.

San Judas Tadeo, te suplico que me concedas la gracia de tener una fe inquebrantable, que me sostenga en los momentos de tribulación y me lleve a la salvación eterna. Te confío todas mis preocupaciones y dificultades, sabiendo que tú, como fiel intercesor, las presentarás ante nuestro Señor.

Amén.

En este segundo día de la novena a San Judas Tadeo, te invito a rezar esta oración con fervor y confianza. Pide a San Judas Tadeo que fortalezca tu fe y te ayude a vivir como un verdadero discípulo de Jesús. Recuerda que la fe es un regalo de Dios y que, con la intercesión de los santos, podemos fortalecerla y hacerla crecer cada día.