Oraciones finales para finalizar el Santo Rosario

Ave María purísima, sin pecado concebida

Tabla de contenidos
Recomendado:   Dios te Salve María Santísima: Significado y Importancia del Rezo del Santo Rosario

El Santo Rosario es una de las devociones más populares y queridas dentro de la Iglesia Católica. Consiste en la recitación de una serie de oraciones y meditaciones en honor a la Virgen María y a los misterios de la vida de Jesús. Al finalizar el Rosario, es tradición recitar una serie de oraciones finales para concluir la devoción de manera adecuada. Estas oraciones finales son una forma de agradecer a Dios y a la Virgen María por los beneficios y gracias recibidos a través de la recitación del Rosario.

Una de las oraciones finales más comunes para finalizar el Santo Rosario es el Ave María purísima, sin pecado concebida. Esta oración es una expresión de veneración y amor a la Virgen María, reconociendo su pureza y su condición de ser concebida sin pecado original. Al recitar esta oración, nos unimos a la Iglesia en su devoción a la Virgen María y le pedimos su intercesión y protección.

Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío

Otra oración final muy popular para finalizar el Santo Rosario es la invocación al Sagrado Corazón de Jesús. Esta oración es una expresión de confianza y entrega total a Jesús, reconociendo su amor y misericordia infinitos. Al recitar esta oración, nos encomendamos al Sagrado Corazón de Jesús y le pedimos que nos guíe y proteja en nuestra vida diaria.

Dios te salve, María, Hija de Dios Padre, llena eres de gracia..

La oración del "Dios te salve, María" es una de las oraciones más conocidas y recitadas en honor a la Virgen María. Esta oración es una forma de alabanza y súplica a la Madre de Dios, reconociendo su papel único en la historia de la salvación. Al recitar esta oración, nos unimos a la Iglesia en su devoción a la Virgen María y le pedimos su intercesión y protección.

Dios te salve, María, Madre de Dios Hijo, llena eres de gracia..

En esta oración, reconocemos a María como la Madre de Dios Hijo. Esta es una verdad fundamental de nuestra fe católica, ya que María fue elegida por Dios para ser la madre de Jesús, el Hijo de Dios hecho hombre. Al recitar esta oración, honramos a María como la Madre de Dios y le pedimos su intercesión y protección.

Recomendado:   Oración al Sagrado Corazón de Jesús para una grave necesidad

Dios te salve, María, Esposa de Dios Espíritu Santo, llena eres de gracia..

En esta oración, reconocemos a María como la Esposa del Espíritu Santo. Según la tradición católica, María fue concebida por obra del Espíritu Santo, lo que la hace la esposa perfecta del Espíritu Santo. Al recitar esta oración, honramos a María como la Esposa del Espíritu Santo y le pedimos su intercesión y protección.

Letanía Lauretana

La Letanía Lauretana es una serie de invocaciones a la Virgen María que se recitan como parte del Santo Rosario. Estas invocaciones son una forma de honrar y venerar a la Virgen María, reconociendo sus virtudes y su papel en la historia de la salvación. Al recitar la Letanía Lauretana, nos unimos a la Iglesia en su devoción a la Virgen María y le pedimos su intercesión y protección.

Señor, ten piedad de nosotros

Cristo, ten piedad de nosotros

Señor, ten piedad de nosotros

Cristo, óyenos

Cristo, escúchanos

Dios, Padre Celestial, ten piedad de nosotros

Dios Hijo, Redentor del mundo, ten piedad de nosotros

Dios Espíritu Santo, ten piedad de nosotros

Trinidad Santa, un solo Dios, ten piedad de nosotros

Santa María, ruega por nosotros

Santa Madre de Dios, ruega por nosotros

Santa Virgen de las vírgenes, ruega por nosotros

Madre de Cristo, ruega por nosotros

Madre de la Iglesia, ruega por nosotros

Madre de la divina gracia, ruega por nosotros

Madre purísima, ruega por nosotros

Madre castísima, ruega por nosotros

Madre virginal, ruega por nosotros

Madre incorrupta, ruega por nosotros

Madre inmaculada, ruega por nosotros

Madre amable, ruega por nosotros

Madre admirable, ruega por nosotros

Madre del Buen Consejo, ruega por nosotros

Madre del Creador, ruega por nosotros

Madre del Salvador, ruega por nosotros

Virgen prudentísima, ruega por nosotros

Virgen digna de veneración, ruega por nosotros

Virgen digna de alabanza, ruega por nosotros

Virgen poderosa, ruega por nosotros

Virgen clemente, ruega por nosotros

Virgen fiel, ruega por nosotros

Espejo de justicia, ruega por nosotros

Trono de sabiduría, ruega por nosotros

Causa de nuestra alegría, ruega por nosotros

Vaso espiritual, ruega por nosotros

Vaso digno de honor, ruega por nosotros

Vaso insigne de devoción, ruega por nosotros

Rosa mística, ruega por nosotros

Torre de David, ruega por nosotros

Torre de marfil, ruega por nosotros

Casa de Oro, ruega por nosotros

Arca de la Alianza, ruega por nosotros

Puerta del cielo, ruega por nosotros

Estrella de la mañana, ruega por nosotros

Salud de los enfermos, ruega por nosotros

Refugio de los pecadores, ruega por nosotros

Consuelo de los afligidos, ruega por nosotros

Auxilio de los cristianos, ruega por nosotros

Reina de los Ángeles, ruega por nosotros

Reina de los Patriarcas, ruega por nosotros

Reina de los Profetas, ruega por nosotros

Reina de los Apóstoles, ruega por nosotros

Reina de los Mártires, ruega por nosotros

Reina de los Confesores, ruega por nosotros

Reina de las Vírgenes, ruega por nosotros

Reina de los Santos, ruega por nosotros

Reina concebida sin pecado original, ruega por nosotros

Reina llevada al cielo, ruega por nosotros

Reina del Santísimo Rosario, ruega por nosotros

Reina de la familia, ruega por nosotros

Reina de la paz, ruega por nosotros

La Letanía Lauretana es una hermosa oración que nos permite honrar y venerar a la Virgen María bajo diferentes títulos y advocaciones. Al recitar estas invocaciones, reconocemos a María como nuestra Reina y Madre, y le pedimos su intercesión y protección en nuestras vidas.

Recomendado:   María y José pidiendo posada: significado de esta tradición navideña

Bajo tu protección nos acogemos Santa Madre de Dios..

Esta oración es una expresión de confianza y entrega total a la Virgen María como nuestra Madre y Protectora. Al recitar esta oración, nos encomendamos a la protección de la Virgen María y le pedimos que nos guíe y proteja en todas las circunstancias de nuestra vida.

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo

En esta oración, pedimos a la Virgen María que interceda por nosotros ante su Hijo, Jesucristo. Reconocemos que solo a través de su intercesión podemos ser dignos de alcanzar las promesas de salvación que Jesús nos ha hecho. Al recitar esta oración, nos encomendamos a la intercesión de la Virgen María y le pedimos que nos ayude a vivir de acuerdo con la voluntad de Dios.

Te suplicamos, Señor, que derrames tu gracia en nuestras almas... Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén

Esta última oración es una súplica a Dios para que derrame su gracia en nuestras almas. Reconocemos que solo a través de la gracia de Dios podemos vivir una vida santa y agradable a sus ojos. Al recitar esta oración, nos encomendamos a la misericordia y gracia de Dios, confiando en su amor y poder para transformar nuestras vidas.

Las oraciones finales para finalizar el Santo Rosario son una forma de agradecer a Dios y a la Virgen María por los beneficios y gracias recibidos a través de la recitación del Rosario. Estas oraciones nos ayudan a expresar nuestra devoción y amor a Dios y a la Virgen María, y nos permiten encomendarnos a su protección y guía en nuestras vidas. Al recitar estas oraciones, nos unimos a la Iglesia en su devoción a la Virgen María y le pedimos su intercesión y protección. Que estas oraciones nos ayuden a crecer en nuestra relación con Dios y a vivir de acuerdo con su voluntad. Amén.

Laura Fernandez

Laura Fernandez

¡Hola! Soy Laura Fernandez creadora de este blog sobre amor y espiritualidad. Me gusta escribir sobre internet y el amor en estos tiempos modernos.

Deja una respuesta

Subir