Oración Ora Pro Nobis: Letanías del Santo Rosario en latín

Letanías del Santo Rosario en latín

Tabla de contenidos

Las letanías del Santo Rosario en latín son una serie de oraciones que se recitan como parte de la devoción del Rosario. Estas letanías son una forma de alabar y pedir la intercesión de la Virgen María y otros santos. La oración "Ora Pro Nobis" se repite después de cada invocación, lo que significa "ruega por nosotros" en latín. A continuación, se presentan las letanías del Santo Rosario en latín, junto con una breve explicación de cada una.

1. Kyrie, eleison

La primera letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Kyrie, eleison", que significa "Señor, ten piedad" en latín. Esta invocación es una súplica a Dios para que tenga misericordia de nosotros y nos perdone nuestros pecados. Es una forma de reconocer nuestra necesidad de la gracia y el perdón de Dios.

2. Christe, eleison

La segunda letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Christe, eleison", que significa "Cristo, ten piedad" en latín. Esta invocación es una súplica a Cristo para que tenga misericordia de nosotros y nos ayude en nuestras necesidades. Reconocemos a Cristo como nuestro Salvador y pedimos su gracia y ayuda en nuestras vidas.

3. Kyrie, eleison

La tercera letanía del Santo Rosario en latín repite la invocación "Kyrie, eleison", que significa "Señor, ten piedad" en latín. Esta repetición nos recuerda nuestra continua necesidad de la misericordia y el perdón de Dios. Reconocemos nuestra fragilidad y pecado, y pedimos a Dios que nos ayude y nos perdone.

4. Christe, audi nos

La cuarta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Christe, audi nos", que significa "Cristo, escúchanos" en latín. Esta invocación es una súplica a Cristo para que nos escuche y atienda nuestras peticiones. Reconocemos a Cristo como nuestro intercesor y pedimos su ayuda y guía en nuestras vidas.

5. Christe, exaudi nos

La quinta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Christe, exaudi nos", que significa "Cristo, escúchanos" en latín. Esta invocación es una súplica a Cristo para que nos escuche y atienda nuestras peticiones. Reconocemos que Cristo es nuestro mediador y pedimos su intercesión en nuestras vidas.

6. Pater de caelis, Deus, miserere nobis

La sexta letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Pater de caelis, Deus, miserere nobis", que significa "Padre celestial, Dios, ten piedad de nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a Dios Padre para que tenga misericordia de nosotros y nos ayude en nuestras necesidades. Reconocemos a Dios como nuestro Padre amoroso y pedimos su gracia y protección.

7. Fili, Redemptor mundi, Deus, miserere nobis

La séptima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Fili, Redemptor mundi, Deus, miserere nobis", que significa "Hijo, Redentor del mundo, Dios, ten piedad de nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a Jesús como el Redentor del mundo para que tenga misericordia de nosotros y nos salve. Reconocemos a Jesús como nuestro Salvador y pedimos su gracia y salvación.

8. Spiritus Sancte, Deus, miserere nobis

La octava letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Spiritus Sancte, Deus, miserere nobis", que significa "Espíritu Santo, Dios, ten piedad de nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica al Espíritu Santo para que tenga misericordia de nosotros y nos guíe en nuestras vidas. Reconocemos al Espíritu Santo como nuestro consolador y pedimos su gracia y dirección.

9. Sancta Trinitas, unus Deus, miserere nobis

La novena letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Sancta Trinitas, unus Deus, miserere nobis", que significa "Santísima Trinidad, un solo Dios, ten piedad de nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a la Santísima Trinidad para que tenga misericordia de nosotros y nos bendiga. Reconocemos a la Santísima Trinidad como el único Dios y pedimos su gracia y bendición en nuestras vidas.

10. Sancta Maria, ora pro nobis

La décima letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Sancta Maria, ora pro nobis", que significa "Santa María, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a la Virgen María para que interceda por nosotros ante Dios. Reconocemos a María como nuestra madre espiritual y pedimos su intercesión y protección.

11. Sancta Dei Genetrix, ora pro nobis

La undécima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Sancta Dei Genetrix, ora pro nobis", que significa "Santa Madre de Dios, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre de Dios para que interceda por nosotros ante su Hijo. Reconocemos a María como la madre de Jesús y pedimos su intercesión y protección.

Recomendado:   Santo Rosario del día jueves completo: Encuentra aquí la oración

12. Sancta Virgo virginum, ora pro nobis

La duodécima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Sancta Virgo virginum, ora pro nobis", que significa "Santa Virgen de las vírgenes, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la Virgen más santa para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen perfecta y pedimos su intercesión y protección.

13. Mater Christi, ora pro nobis

La decimotercera letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Mater Christi, ora pro nobis", que significa "Madre de Cristo, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre de Cristo para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre de Jesús y pedimos su intercesión y protección.

14. Mater divinae gratiae, ora pro nobis

La decimocuarta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Mater divinae gratiae, ora pro nobis", que significa "Madre de la divina gracia, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre de la gracia divina para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la fuente de toda gracia y pedimos su intercesión y protección.

15. Mater purissima, ora pro nobis

La decimoquinta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Mater purissima, ora pro nobis", que significa "Madre purísima, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre más pura para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen sin mancha y pedimos su intercesión y protección.

16. Mater castissima, ora pro nobis

La decimosexta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Mater castissima, ora pro nobis", que significa "Madre castísima, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre más casta para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen pura y pedimos su intercesión y protección.

17. Mater inviolata, ora pro nobis

La decimoséptima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Mater inviolata, ora pro nobis", que significa "Madre inviolada, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre sin mancha para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen sin pecado y pedimos su intercesión y protección.

18. Mater intemerata, ora pro nobis

La decimoctava letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Mater intemerata, ora pro nobis", que significa "Madre inmaculada, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre sin mancha para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen sin pecado y pedimos su intercesión y protección.

19. Mater amabilis, ora pro nobis

La decimonovena letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Mater amabilis, ora pro nobis", que significa "Madre amable, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre amorosa para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre compasiva y pedimos su intercesión y protección.

20. Mater admirabilis, ora pro nobis

La vigésima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Mater admirabilis, ora pro nobis", que significa "Madre admirable, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre admirable para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre maravillosa y pedimos su intercesión y protección.

21. Mater boni consilii, ora pro nobis

La vigesimoprimera letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Mater boni consilii, ora pro nobis", que significa "Madre del buen consejo, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre del buen consejo para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como nuestra consejera y pedimos su intercesión y protección.

22. Mater Creatoris, ora pro nobis

La vigesimosegunda letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Mater Creatoris, ora pro nobis", que significa "Madre del Creador, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre del Creador para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre de toda la creación y pedimos su intercesión y protección.

23. Mater Salvatoris, ora pro nobis

La vigesimotercera letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Mater Salvatoris, ora pro nobis", que significa "Madre del Salvador, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la madre del Salvador para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre de Jesús y pedimos su intercesión y protección.

24. Virgo prudentissima, ora pro nobis

La vigesimocuarta letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Virgo prudentissima, ora pro nobis", que significa "Virgen prudentísima, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la Virgen más prudente para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen sabia y pedimos su intercesión y protección.

25. Virgo veneranda, ora pro nobis

La vigesimoquinta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Virgo veneranda, ora pro nobis", que significa "Virgen venerable, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la Virgen venerada para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen digna de honor y pedimos su intercesión y protección.

26. Virgo praedicanda, ora pro nobis

La vigesimosexta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Virgo praedicanda, ora pro nobis", que significa "Virgen digna de alabanza, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la Virgen digna de alabanza para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen digna de elogio y pedimos su intercesión y protección.

27. Virgo potens, ora pro nobis

La vigesimoséptima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Virgo potens, ora pro nobis", que significa "Virgen poderosa, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la Virgen poderosa para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen llena de poder y pedimos su intercesión y protección.

28. Virgo clemens, ora pro nobis

La vigesimoctava letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Virgo clemens, ora pro nobis", que significa "Virgen clemente, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la Virgen clemente para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen compasiva y pedimos su intercesión y protección.

29. Virgo fidelis, ora pro nobis

La vigesimonovena letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Virgo fidelis, ora pro nobis", que significa "Virgen fiel, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la Virgen fiel para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Virgen llena de fe y pedimos su intercesión y protección.

30. Speculum iustitiae, ora pro nobis

La trigésima letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Speculum iustitiae, ora pro nobis", que significa "Espejo de justicia, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como el espejo de la justicia para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como el modelo de justicia y pedimos su intercesión y protección.

Recomendado:   Salve María llena eres de gracia: significado y explicación

31. Sedes sapientiae, ora pro nobis

La trigésimoprimera letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Sedes sapientiae, ora pro nobis", que significa "Trono de sabiduría, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como el trono de la sabiduría para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la fuente de sabiduría y pedimos su intercesión y protección.

32. Causa nostrae laetitiae, ora pro nobis

La trigésimosegunda letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Causa nostrae laetitiae, ora pro nobis", que significa "Causa de nuestra alegría, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la causa de nuestra alegría para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la fuente de nuestra alegría y pedimos su intercesión y protección.

33. Vas spirituale, ora pro nobis

La trigésimotercera letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Vas spirituale, ora pro nobis", que significa "Vaso espiritual, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como el vaso espiritual para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como el recipiente de la gracia divina y pedimos su intercesión y protección.

34. Vas honorabile, ora pro nobis

La trigésimocuarta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Vas honorabile, ora pro nobis", que significa "Vaso honorable, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como el vaso honorable para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como digna de honor y pedimos su intercesión y protección.

35. Vas insigne devotionis, ora pro nobis

La trigésimoquinta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Vas insigne devotionis, ora pro nobis", que significa "Vaso insigne de devoción, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como el vaso insigne de devoción para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como un modelo de devoción y pedimos su intercesión y protección.

36. Rosa mystica, ora pro nobis

La trigésimosexta letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Rosa mystica, ora pro nobis", que significa "Rosa mística, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la rosa mística para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como un símbolo de belleza y pedimos su intercesión y protección.

37. Turris Davidica, ora pro nobis

La trigésimoseptima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Turris Davidica, ora pro nobis", que significa "Torre de David, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la torre de David para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como un refugio seguro y pedimos su intercesión y protección.

38. Turris eburnea, ora pro nobis

La trigésimooctava letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Turris eburnea, ora pro nobis", que significa "Torre de marfil, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la torre de marfil para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como un refugio seguro y pedimos su intercesión y protección.

39. Domus aurea, ora pro nobis

La trigésimonovena letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Domus aurea, ora pro nobis", que significa "Casa dorada, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la casa dorada para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como un lugar de refugio y pedimos su intercesión y protección.

40. Foederis arca, ora pro nobis

La cuadragésima letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Foederis arca, ora pro nobis", que significa "Arca de la Alianza, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como el arca de la alianza para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como un símbolo de la presencia de Dios y pedimos su intercesión y protección.

41. Ianua caeli, ora pro nobis

La cuadragésimoprimera letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Ianua caeli, ora pro nobis", que significa "Puerta del cielo, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la puerta del cielo para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como el camino hacia la vida eterna y pedimos su intercesión y protección.

42. Stella matutina, ora pro nobis

La cuadragésimosegunda letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Stella matutina, ora pro nobis", que significa "Estrella de la mañana, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la estrella de la mañana para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como un símbolo de esperanza y pedimos su intercesión y protección.

43. Salus infirmorum, ora pro nobis

La cuadragésimotercera letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Salus infirmorum, ora pro nobis", que significa "Salud de los enfermos, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la salud de los enfermos para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como una fuente de sanación y pedimos su intercesión y protección.

44. Refugium peccatorum, ora pro nobis

La cuadragésimo cuarta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Refugium peccatorum, ora pro nobis", que significa "Refugio de los pecadores, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como el refugio de los pecadores para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como un lugar de perdón y pedimos su intercesión y protección.

45. Consolatrix afflictorum, ora pro nobis

La cuadragésimoquinta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Consolatrix afflictorum, ora pro nobis", que significa "Consuelo de los afligidos, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como el consuelo de los afligidos para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como un consuelo en tiempos de dificultad y pedimos su intercesión y protección.

46. Auxilium Christianorum, ora pro nobis

La cuadragésimosexta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Auxilium Christianorum, ora pro nobis", que significa "Auxilio de los cristianos, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como el auxilio de los cristianos para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como nuestra ayuda en la vida cristiana y pedimos su intercesión y protección.

47. Regina Angelorum, ora pro nobis

La cuadragésimoseptima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina Angelorum, ora pro nobis", que significa "Reina de los ángeles, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina de los ángeles para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la reina del cielo y pedimos su intercesión y protección.

48. Regina Patriarcharum, ora pro nobis

La cuadragésimoctava letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina Patriarcharum, ora pro nobis", que significa "Reina de los patriarcas, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina de los patriarcas para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre de la fe y pedimos su intercesión y protección.

Recomendado:   Novena a Cristo Rey: Descarga el PDF y vive la devoción en 2022 y 2023

49. Regina Prophetarum, ora pro nobis

La cuadragésimonovena letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina Prophetarum, ora pro nobis", que significa "Reina de los profetas, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina de los profetas para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre de la esperanza y pedimos su intercesión y protección.

50. Regina Apostolorum, ora pro nobis

La quincuagésima letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Regina Apostolorum, ora pro nobis", que significa "Reina de los apóstoles, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina de los apóstoles para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre de los enviados y pedimos su intercesión y protección.

51. Regina Martyrum, ora pro nobis

La quincuagésimoprimera letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina Martyrum, ora pro nobis", que significa "Reina de los mártires, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina de los mártires para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre de los mártires y pedimos su intercesión y protección.

52. Regina Confessorum, ora pro nobis

La quincuagésimosegunda letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina Confessorum, ora pro nobis", que significa "Reina de los confesores, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina de los confesores para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre de los testigos de la fe y pedimos su intercesión y protección.

53. Regina Virginum, ora pro nobis

La quincuagésimotercera letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina Virginum, ora pro nobis", que significa "Reina de las vírgenes, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina de las vírgenes para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como el modelo de pureza y pedimos su intercesión y protección.

54. Regina Sanctorum omnium, ora pro nobis

La quincuagésimocuarta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina Sanctorum omnium, ora pro nobis", que significa "Reina de todos los santos, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina de todos los santos para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la madre de todos los santos y pedimos su intercesión y protección.

55. Regina sine labe originali concepta, ora pro nobis

La quincuagésimoquinta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina sine labe originali concepta, ora pro nobis", que significa "Reina concebida sin pecado original, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina concebida sin pecado original para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la Inmaculada Concepción y pedimos su intercesión y protección.

56. Regina in caelum assumpta, ora pro nobis

La quincuagésimosexta letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina in caelum assumpta, ora pro nobis", que significa "Reina asunta al cielo, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina asunta al cielo para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la reina glorificada y pedimos su intercesión y protección.

57. Regina sacratissimi Rosarii, ora pro nobis

La quincuagésimoseptima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina sacratissimi Rosarii, ora pro nobis", que significa "Reina del Santísimo Rosario, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina del Santísimo Rosario para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la reina de esta devoción y pedimos su intercesión y protección.

58. Regina pacis, ora pro nobis

La quincuagésimooctava letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Regina pacis, ora pro nobis", que significa "Reina de la paz, ruega por nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la reina de la paz para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como la fuente de la paz y pedimos su intercesión y protección.

59. Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, parce nobis, Domine

La quincuagésimonovena letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, parce nobis, Domine", que significa "Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros, Señor" en latín. Esta invocación es una súplica a Jesús como el Cordero de Dios para que tenga piedad de nosotros y nos perdone nuestros pecados. Reconocemos a Jesús como nuestro Salvador y pedimos su misericordia y perdón.

60. Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, exaudi nos, Domine

La sexagésima letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, exaudi nos, Domine", que significa "Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, escúchanos, Señor" en latín. Esta invocación es una súplica a Jesús como el Cordero de Dios para que nos escuche y atienda nuestras peticiones. Reconocemos a Jesús como nuestro intercesor y pedimos su ayuda y gracia.

61. Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, miserere nobis

La sexagésimoprimera letanía del Santo Rosario en latín continúa con la invocación "Agnus Dei, qui tollis peccata mundi, miserere nobis", que significa "Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros" en latín. Esta invocación es una súplica a Jesús como el Cordero de Dios para que tenga piedad de nosotros y nos perdone nuestros pecados. Reconocemos a Jesús como nuestro Salvador y pedimos su misericordia y perdón.

62. Ora pro nobis, sancta Dei Genetrix

La sexagésimosegunda letanía del Santo Rosario en latín comienza con la invocación "Ora pro nobis, sancta Dei Genetrix", que significa "Ruega por nosotros, santa Madre de Dios" en latín. Esta invocación es una súplica a María como la santa Madre de Dios para que interceda por nosotros. Reconocemos a María como nuestra madre espiritual y pedimos su intercesión y protección.

63. Ut digni efficiamur promissionibus Christi

La sexagésimotercera letanía del Santo Rosario en latín concluye con la invocación "Ut digni efficiamur promissionibus Christi", que significa "Para que seamos dignos de las promesas de Cristo" en latín. Esta invocación es una súplica para que seamos dignos de las promesas de Cristo y vivamos de acuerdo con su voluntad. Reconocemos nuestra necesidad de la gracia de Dios y pedimos su ayuda para vivir una vida santa.

Las letanías del Santo Rosario en latín son una hermosa forma de alabar y pedir la intercesión de la Virgen María y otros santos. A través de estas oraciones, reconocemos a María como nuestra madre espiritual y pedimos su intercesión y protección. También reconocemos a Jesús como nuestro Salvador y pedimos su misericordia y perdón. Al recitar estas letanías, nos unimos a la larga tradición de devoción mariana y nos acercamos más a Dios a través de la oración. Que estas letanías nos inspiren a profundizar nuestra relación con Dios y a buscar la intercesión de María en nuestras vidas. Ora pro nobis, sancta Dei Genetrix. Amen.

Laura Fernandez

Laura Fernandez

¡Hola! Soy Laura Fernandez creadora de este blog sobre amor y espiritualidad. Me gusta escribir sobre internet y el amor en estos tiempos modernos.

Deja una respuesta

Subir